El patito feo del baloncesto balcánico de los 80: Partizan de Belgrado

Si por casualidad surge en una conversación los grandes equipos del baloncesto balcánico de los 80, se nombrará de forma instantánea y unánime dos nombres, Cibona y Jugoplastika, desde luego, con todo merecimiento, pero una vez pasado el tiempo, creo que cada vez surge más un nombre, Partizan, el de la época de 1987-1989, veamos por qué.

En ese periodo ganaron una liga y una copa yugoslava, fueron terceros en la Final Four de Gante´88 y ganaron la Korac del 89, no es ya mal palmarés, pero hay que sumarle, la liga del 81 y la copa del 85. Si hacemos un balance, vemos que empezaron a finales de los 70, liga del 76 y 79, copa del 79, y Korac del 78 y 79, es decir fue un grande en esa época, surge la Cibona y le arañan los dos títulos ya reseñados, y cuando esta desciende por el debilitamiento del equipo y finalmente con la marcha de Petrovic, se convierten en los reyes, hasta que aparece la Jugoplastika, equipo mucho más compensado, y mejor, todo hay que decirlo.

Analicemos el equipo. Lo primero que destaca es que lo entrenaba un joven, lo de la apuesta por la juventud es un clásico en los Balcanes, y en este equipo más. Dusko Vujosevic, si te suena el nombre, pues puede ser, de esta época, que entrenó en Granada, en Italia, o que es el actual entrenador del Partizan, es decir, que sigue dando lecciones a los jóvenes y consiguiendo éxitos.

Antes de analizar a los jugadores, vamos a hablar del estilo de juego que tenían. En defensa solían jugaban en individual, con una primera línea que arriesgaba para intentar el robo y salir al contra ataque una de sus señas, La segunda línea era más pasiva, dejando tiros abierto a los jugadores altos e intentar asegurar el rebote para salir rápidos, o bien intentar taponar a los pequeños que superaran a sus compañeros.

En ataque, debido a que no tenían un tiro exterior fiable, intentaban correr el mayor número de contra ataques posibles, era su arma favorita, ya que además partían con una configuración para ello, por diversos motivos. Un equipo muy alto, en el que podían poner hasta 4 jugadores con 2 metros o más, lo que facilitaba las tareas del rebote. Sus jugadores interiores, recordemos que en la época eran del 3-5, tenían una gran facilidad para correr la pista, lo cual posibilitaba perfectamente las oleadas de atacantes, es decir, los que llegaban primeros y la incorporación de 1 o 2 trailers.

En estático, sufrían más, por lo comentado de su tiro exterior, debido a ello, intentaban explotar sus virtudes, que básicamente eran hombres altos móviles y con un buen tirito desde 4-5 metros y unos exteriores que eran buenos penetradores. Sus ataques se iniciaban muchas veces en un lateral, con dos grandes jugando un bloqueo en la proyección de la línea de tiro libre, el otro interior solo, abierto en el lado débil, y a partir de ahí, jugar bloqueos y continuaciones, buscando no atascar la zona cercana al aro, para no entorpecer una posible penetración o pase doblado al lado débil.

Ahora hablemos de algunos de sus jugadores, teniendo en cuenta que la escuadra era una clara mezcla de veteranos currantes que conocían el oficio a la perfección y jóvenes talentosos, tras esto empecemos:

De bases tenemos dos viejos amigos del basket español. Zeljko Obradovic, que era el base suplente, y se dedicaba a subir la intensidad defensiva y a ordenar el ataque, nos suena eso a algo.... El base titular era Aleksandar Đorđević, suena mejor Djordjevic, era un talentoso base con pelo, que ya tenía algunas de sus características, como era la defensa agresiva para intentar robar el balón, que no quiere decir que defendiera muy bien, la capacidad de pase, el gusto por las transiciones rápidas y su habilidad para penetrar, y era el más fiable en el tiro exterior. También, el carácter, de hecho, a quien dice que no fue a la selección Plavi hasta que se fue Petrovic por cierto pique que tuvieron, y que Sasha no sólo no se amilanó, si no que ganó....

De escoltas, recuerda escribo de memoria, estaban Nakic, escolta fuerte y sacrificado, y un jovenzuelo que aún no llevaba la camiseta blanca debajo con las mangas cortadas,ese sí ese, el especialista defensivo exterior, Pedrag Danilovic, jugador de gran defensa y una gran capacidad de penetración, y que aún no tenía ese gran tiro exterior que le haría subir de nivel.

De alero alto, uno de los primeros que podemos catalogar como tal, uno de mis favoritos Paspalj, un tío que destacaba por su movilidad buen tirito, no con rango de 6,25, y lectura de juego. Para el que dude de su juego, recordemos que le tapo la titularidad durante un buen tiempo a un tal Tony.

Dentro jugaban dos tíos muy diferentes, Grobic, un tío super currante y muy muy efectivo, y un juego de corte más tradicional, más interior, más de juego de espaldas que de cara, su compañero, sin embargo, era un ejemplo de pivot moderno, alto, ágil y rápido como para ser finalizador de contra ataques, con tiro exterior, como para que sus continuaciones tras bloqueo pudieran ser hacia fuera buscando el tiro cómodo, más si le flotaban, gran pasador, con un aura de grandísimo jugador y de sobrado, era Vlade Divac.

Ya sólo por palmarés en ese trienio debería ser considerado como uno de los equipos punteros, si a eso le sumas los jugadores que había en esa plantilla creo que es más que merecido el por lo menos citarlo, pero mira lo que han hecho y siguen haciendo, creo que es más que merecido y justificado el decirlo, como en el cuento que da título a este escrito, el Partizan pasó de ser un Patito feo a ser un Cisne.

Gracias al amigo Sunara tenemos esto y esto que te permitirá comprobar como juagaban, son los mismo enlaces que la entrada de Dino Radja